Durante el abrazo sintió que le llegaba
un frío desconocido, un rugido dulce parecido al de un trueno lejano y
profundo. Y se estremeció.
martes, 31 de marzo de 2015
lunes, 30 de marzo de 2015
BAMBOLEO HUECO
Mecía sus sueños bajo el impulso de un viento flácido y, por
momentos, inexistente. En ese bamboleo hueco pasaba las horas hasta que un ser
sobrenatural llamó a su puerta, lo cual es un decir porque nadie sabe a ciencia
cierta –él desde luego no- por dónde demonios pudo colarse aquel ente en el
salón de su casa. Cuando vio los ojos del forastero intentó reír, pero la
carcajada no fue más allá de un mero rictus. Por fin entendió que alguien debía
morir, que el espectro le había elegido a él, y que hoy era el día. Fue
indoloro. Cuando quiso darse cuenta, ya tenía el fantasma dentro de él.
domingo, 29 de marzo de 2015
FRÍO
A veces no podía dormir y, entre una época
glacial y otra, se refugiaba en las mantas mientras pasaban por su cabeza mil
tonterías en forma de pensamientos. Pensaba por ejemplo que, viviendo como
vivía en una sociedad en la que el derroche era la mayor virtud, no se
explicaba por qué le había tocado en suerte un casero tan poco virtuoso, al
menos en lo que a encendidos de la caldera se refiere. Hacía frío, mucho frío,
tanto que su aliento apenas si podía avanzar unos centímetros antes de caer
derrotado por la gélida atmósfera que envolvía la habitación. También pensaba
que ser pobre en el hemisferio norte es una suerte de doble pobreza, y que su
estupidez o su mala suerte debían ser mayúsculas tirando a estratosféricas,
para continuar sumergido en la misma mierda después de tanto viaje.
sábado, 28 de marzo de 2015
NÁUFRAGO
Vivía con naturalidad aquella suerte de reflujo que aconteció
después de la tormenta. Náufrago por enésima vez, perdido de nuevo entre las
nubes de dimes y las montañas de diretes, no acertaba a dar con aquello que la
hiciera salir de esa tierra suya tan querendona. Los días se amontonaban y, por
momentos, el vacío se le antojaba nauseabundo.
viernes, 27 de marzo de 2015
VOLVER A NACER
Me gustaría volver a nacer, aunque sólo fuera por un rato, pero
esta vez buena. Gozaría mucho con ser capaz de no imaginar la nada y que el
cero en tanto que concepto me resultara por completo incomprensible. Esta vez
me encantaría ser capaz de crear mi propio mundo, de sentirme tranquila y
segura en él. De veras que no me importaría volver de nuevo a nacer, siquiera
para dejar de echar carreras con mi propia sombra.
jueves, 26 de marzo de 2015
LOS ASUNTOS DE LA LABRANZA
Con la cabeza ladeada y la mirada ausente, escuchaba los exhortos
de su padre para que cogiera las riendas de la finca, sin que las diatribas de
aquel buen hombre lograran hacer mella alguna en su espíritu. Tentado estuvo de
hacerse cura, a la vista del interés que mostraba por las obscuras cosas del
más allá, sólo comparable a su desinterés por los asuntos de la labranza y del
más acá. Pero en esto llegó la guerra, y todo –lo de más allá y lo de más acá-
se lo llevó por delante.
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