miércoles, 30 de mayo de 2012

POR INERCIA

Rota la vida, el animal de secreta mirada andaba su camino como quien dice por inercia, recordando los tiempos entrevenados de gozos y penas donde, al finalizar la noche, se entreabría una luz manchada de azahar y un aire que más que claro parecía invisible. Fantasma de sí mismo, y sin saberlo, una tarde llegó al limbo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario