martes, 6 de enero de 2015

EN UN ESTANQUE DE AGUA FRESCA

Como si las hubiese colgado el mismo sol, del fondo de sus ojos brotaban imágenes de flores –hoy predominaban las camelias de pétalos caídos- , y unos dedos largos y esbeltos que los recogían depositándolos en un estanque de agua fresca. De entre las cañas surgían mariposas y plagas de risas, y se suponía feliz. Fue el grito de un vecino que resonó como el de un ogro en el patio de la corrala lo que finalmente le despertó. Sin perder el buen sabor de boca que le procuró aquel sueño, se limitó a constatar que seguía sólo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario