miércoles, 14 de marzo de 2012

PARÁBOLA DEL GUSANO

Algo había oído de la historia de aquel rey que se vio forzado a viajar en las tripas de un mendigo, todo gracias a un gusano que se comió un buen pedazo de ese mismo rey, y de un mendigo que tuvo la fortuna de comerse un pescado que, a su vez, había dado buena cuenta del afortunado gusano. Lo que nadie le dijo es que fue un hacha construida con palabras la que dejó sin aliento la vida de aquel rey.

No hay comentarios:

Publicar un comentario