viernes, 14 de febrero de 2014

LO QUE PUDO CON ÉL

Dotado de una fortaleza casi hercúlea. y de unos ojos capaces de ver más de lo que otros pueden soportar, hubo un tiempo en que creyó poder conseguirlo todo. Claro que también tenía sus limitaciones. Nunca imaginó, por ejemplo, qué clase de deseo era ese que le empujaba a tocarla con sus dedos, aunque descubrió que podía evitar los celos y que podía, igualmente, dejar de amar. Poco tiempo después, sin darse cuenta, descubrió también que tenía una forma especialmente penosa de mearse encima. Y eso fue lo que pudo con él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario